Tras el no demasiado éxito de su Rodrigo, escrito para Florencia, Haendel compuso en Italia una segunda ópera que alcanzaría mucha más resonancia y que puede considerarse sin duda como su principal aportación al género antes de que cruzara el Canal de La Mancha para instalarse en Londres. Estrenada en Venecia en diciembre de 1709, la obra contaba con un estupendo libreto del cardenal Vincenzo Grimani sobre un episodio especialmente difundido de la historia de Roma. Eduardo López Banzo lleva años trabajando intensamente en torno a la ópera de Haendel y aquí presenta esta Agrippina con un elenco excepcional, que cuenta en el rol titular con una de las grandes haendelianas de nuestros días, la mezzo sueca Ann Hallenberg, que encabeza un equipo en el que también figuran intérpretes tan bien conocidos como Vivica Genaux, María Espada o Luigi di Donato.