Virtuosismo y expresividad —aquél al servicio de ésta— se dan cita en la propuesta de Judith Jáuregui en su homenaje a De Larrocha en este ciclo del Centro Nacional de Difusión Musical (CNDM). Hay en ella pequeñas formas de amplio aliento expresivo como las Impresiones íntimas de Mompou y construcciones de ambicioso alcance como la Sonata de Grieg. Pero también composiciones que se explican más allá de su planteamiento, como la Fantasía en re menor de Mozart, relecturas brillantes de obras de otros, como la transcripción de Schubert por ese Liszt que nos lleva también al ensueño propio, o muestras de sentimientos extremos como en la Balada nº 1 de Chopin. Cabe destacar, asimismo, la presencia de la cada vez más y mejor reivindicada Amy Beach.