Tras la muerte de su padre, Manuel Molina, hace más de cinco años, Alba sintió el irrefrenable impulso de empezar a cantar las canciones de Lole y Manuel. No era sólo una forma de rendir homenaje a sus padres, sino una necesidad física de acercarse a su música y a ellos mismos aún más. Tras tres álbumes (Alba Molina canta a Lole y Manuel, Caminando con Manuel y Para Lole y Manuel), Alba nos presenta un nuevo trabajo discográfico llamado El beso, con el que ha explorado decenas de caminos para encontrar la mejor manera de compartir con nosotros todo lo que lleva dentro, esos sentimientos y emociones, sus miedos, sus alegrías. En este espectáculo su voz nos va a contar en un tono suave, íntimo, con un sonido más jazzístico, pero sin perder su toque flamenco, historias que hablan de amor y de desengaño, de tristeza y alegría.